Santander.– Desde el romanticismo de 'El mismo amor, la misma lluvia' a los muñequitos animados de 'Futbolín', pasando por el thriller de 'El secreto de sus ojos' o el humor 'negro' del doctor House, a Juan José Campanella (Buenos Aires, 1959) hay pocas cosas que se le resistan.
Narrador audiovisual incansable, su último proyecto cinematográfico ('Futbolín' o 'Metegol' en su título original) le dejó "exhausto". Por ello decidió meterse en una camisa de once varas, la teatral, de la mano de la comedia 'Parque Lezama'. "Dirigí mi primera obra como antídoto a tanta tecnología, para volver a conectarme con los actores y el texto, y la verdad es que me enamoré", confiesa el cineasta argentino.
Pero este nuevo amor no le alejará de su gran compañera de viaje, la gran pantalla: "Me encanta encerrarme en una sala de montaje con una película. Lo que realmente me gusta del cine es el control: en el teatro cada espectador ve una cosa, en el cine ven lo que yo quiero. Además, un elemento que el teatro no tiene y el cine sí es la inmortalidad, la permanencia en el tiempo", explica Campanella.
El próximo billete a las salas de cine le llevará a un viaje de tema social. Lo hará de la mano de Eduardo Sacheri, con quien ya viajó en 'El secreto de sus ojos'. El cineasta comenta que este nuevo proyecto supone "un lindo desafío que tiene que ver con el choque de clases porque últimamente noto que lejos de estar convergiendo, se separan cada vez más".
La revolución de Internet
El director porteño, que protagoniza un ciclo de cine organizado por la la UIMP y la Filmoteca de Cantabria, es el centro del homenaje que propone el encuentro El audiovisual en español y las nuevas tecnologías. A este respecto, explica que Internet es "una revolución" y la rapidez del desarrollo de las nuevas tecnologías le hacen temer que "el cine pase por la historia como algo del siglo XX". Y aunque trata de no ser tremendista, explica que le da miedo que con tanto 'blockbuster', "el cine que me interesa desaparezca".