Santander.– Los alumnos del Aula de Verano "Ortega y Gasset" de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo han participado en una sesión centrada en las causas y las consecuencias de la crisis económica mundial. El catedrático de Economía de la Empresa de la Universidad Autónoma de Madrid, Emilio Ontiveros, ha explicado el funcionamiento de las grandes economías mundiales en un entorno globalizado y las claves para entender la situación actual de España en el mercado internacional.
"Económicamente hablando, el mundo es un pañuelo y lo que ocurre en un rincón puede acabar generando una crisis global. Se vivía una situación de confort, sin grandes convulsiones ni tsunamis económicos ni financieros", ha contado el economista. Todo cambió en el verano de 2007 cuando explotaron las hipotecas subprime en Estados Unidos. En unos meses la crisis se convirtió en un fenómeno global y salpicó a gran parte de los países de la zona euro. Así, ha señalado Ontiveros que, a día de hoy, "la crisis todavía no se ha superado en la eurozona", y no tanto por los efectos secundarios, ha insistido, "sino porque los enfermos (haciendo referencia a los países en crisis) siguen recibiendo terapias excepcionales".
"Si miramos atrás -ha explicado el catedrático-, la principal causa de la crisis mundial estuvo en las continuas previsiones acerca de un indefinido crecimiento de los precios". Así, ha explicado que "había gente que compraba viviendas porque tenían casi garantizado que los precios subirían y podrían venderlas a un precio mayor". Sin embargo, Ontiveros ha señalado que "hay un momento en el que los precios de cualquier activo pueden dejar de subir" y cuando ese momento llegó, los ciudadanos se vieron envueltos en una situación en la que no podían ni vender la vivienda ni pagar su hipoteca. Fue entonces cuando explotó la crisis norteamericana que se llevó a muchos países por delante.
Ahora, Estados Unidos crece "muy por encima de la zona euro, con una tasa de desempleo del 4.8% mientras que en España este porcentaje duplica el promedio de la eurozona". Y no son las únicas consecuencias que la crisis económica ha dejado a nuestro país y al conjunto de la Comunidad Económica Europea, donde "nos encontramos con una inflación negativa y unos tipos de intereses que rozan el cero". Además, Ontiveros ha afirmado que "la digestión de esta crisis es más dura en aquellos países, como España, que tienen un alto volumen de deuda".
Por último, el catedrático ha insistido en que "los gobiernos deberían tener preparado un arsenal para tratar de evitar males peores y que las economías se hundan". "No voy a defender que los gobiernos intervengan diariamente en el funcionamiento de las economías, pero hay que tener en cuenta que los mercados no son perfectos y a veces pueden fallar", ha concluido.
Fotografía: Juan Manuel Serrano
