Santander, 5 de septiembre de 2019.- La directora de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, María Jesús Lamas, ha destacado hoy que “en un futuro no muy lejano vamos a tener microbiota como herramienta terapéutica, probablemente como medicamento”. Así lo ha manifestado en la inauguración del encuentro El microbioma y la salud. Repercusión en las terapias, que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) los días 5 y 6 de septiembre.
El microbiota es el conjunto de microorganismos que se encuentran generalmente asociados a tejidos sanos (piel, mucosas, etc.) del cuerpo humano. Los cambios en el microbioma son una herramienta esencial para el tratamiento de diarreas, para regular el uso de anti-inflamatorios o para mejorar la selección de pacientes respondedores en la inmunoterapia del cáncer.
“La importancia de la aplicación que va a tener el uso de microbiota en la asistencia todavía no podemos ni imaginárnosla”, ha explicado Lamas en su intervención. Asimismo, ha aseverado que “ya hay alguna compañía interesada en regularlo y de someterlo a evaluación de la Agencia Europea del Medicamento”.
“Surgen las dudas de si debe ser un medicamento o no”, ha explicado la ponente. Bajo su punto de vista, la transferencia de microbiota “encaja en esa definición de medicamento” porque, según ha detallado, es “capaz de curar con un mecanismo de acción farmacológico”.
No obstante, la especialista ha matizado que, como esta herramienta es “susceptible” de ser “sometida a buenas prácticas de fabricación y elaboración”, debe ser “inspeccionable”, para garantizar su “calidad” y “eficacia” en los ensayos clínicos. “Esto no va a significar una dificultad del acceso a la transferencia de microbiota”, ha asegurado.
En esta línea, Lamas ha aclarado que su catalogación como medicamento no “puede ser un freno al uso de esta herramienta”. “Es nuestra responsabilidad que se haga con la calidad y las garantías de eficacia y seguridad necesarias para proteger la salud de nuestros pacientes”, ha defendido.
“De momento estamos en un terreno de desafíos emocionantes y, al mismo tiempo, en un grado de riesgo como ya se ha demostrado en algunos ensayos clínicos de aplicación inmediata”, ha admitido.
Como máxima representante de la Agencia Española del Medicamento, ha apuntado que a parte de lo que se haga desde este organismo y de la disponibilidad de la transferencia de microbiota en los hospitales, desarrollar esta herramienta terapéutica depende de la organización.
En el acto de inauguración también ha intervenido el exrector de la UIMP, César Nombela, quien ha puesto el foco en las materias sobre las cuales se van a tratar durante el curso. “La palabra microbioma se ha puesto de moda”, ha destacado durante su discurso.
Para el director de la cátedra Extraordinaria de Salud, Crecimiento y Sostenibilidad MSD-UIMP, este concepto, microbioma, sugiere tres elementos: conocimiento, individualidad y terapia. Sobre el segundo, ha explicado que las personas, en su interior, además de los genes específico, tienen su biota específica.
Además, Nombela ha expresado que “cientos de tratamientos están influenciados en sus resultados por el microbiota del organismo del afectado”. En este sentido, ha matizado que “todavía” no se sabe cómo afecta, puesto que es “muy difícil” profundizar en ello.
“Lo cierto es que, a la hora de poner los medios para avanzar, ha faltado tiempo a la gente para aplicarlo”, ha lamentado Nombela, insistiendo en que “las autoridades regulatorias han tenido que enfrentarse a las prisas”.
Foto: Esteban Cobo (UIMP)