Santander.- El periodista y analista económico Fernando González Urbaneja ha reflexionado sobre los Aspectos éticos y deontológicos de la información sobre emergencias dentro del encuentro El papel de los profesionales en los medios de comunicación en respuesta humanitaria ante las situaciones de crisis, emergencias y desastres que se ha celebrado estos días en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) como parte de la cátedra extraordinaria de Salud, Crecimiento y Sostenibilidad (MSD-UIMP).
El expresidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) ha explicado que “el periodismo está viviendo una nueva realidad que no es elegible” y que “ha roto el monopolio de la intermediación informativa que teníamos los periodistas”. Así, ha añadido que es momento para que “los veteranos demos paso a nuevas voces”.
Urbaneja ha indicado que “sin un marco ético compartido, el periodismo profesional no podría existir” por lo que ha señalado también que “es importante ser buena gente”.
Por otro lado, el analista económico ha reflejado que buena parte de la crisis de los medios, tanto en temas de rentabilidad como credibilidad, se debe a que a pesar de contar con “los mejores periodistas”, se ha perdido la referencia del editor como “persona que nos protege y nos da valor”. A su juicio, “si disociamos a los periodistas de los medios de comunicación estamos rompiendo el equilibrio básico”, y “cuando se rompe esa unión, todos perdemos”.
En cuanto a la cobertura mediática de catástrofes y actos terroristas, Urbaneja ha indicado que “lo más importante es cuidar a las víctimas, y mostrar siempre respeto y responsabilidad hacia ellas” algo que a su juicio no se ha hecho bien en nuestro país. En su opinión “a veces la presión por conseguir información ha llevado a invadir la intimidad de las víctimas”. Otro aspecto fundamental en esta clase de periodismo es “elegir un lenguaje adecuado que transmita serenidad”.
Otros problemas que ha destacado han sido, por un lado, que en España “la lógica que caracteriza el relato de la información deportiva ha ganado la batalla”, y como consecuencia, “la información política se ha visto afectada”. Y por otro, la necesidad de tratar la información “en informativos y no en programas de entretenimiento”.
Por último el expresidente de la FAPE ha recalcado que la profesionalidad de un buen periodista no está en el tamaño de su agenda de contactos, sino en su capacidad de distinguir lo que es mentira, y saber “separar información de opinión”. Por eso, ha recordado los dos fundamentos básicos: “la búsqueda de la verdad y el principio de verificación”.
Fotografía: UIMP | Juan Manuel Serrano