Santander.- El consejero delegado de Hispasat, Carlos Espinós, la directora de Telecomunicaciones y Aplicaciones Integradas de la Agencia Espacial Europea (ESA), Magali Vaissiere, han afrontado la clausura del IX Encuentro Hispasat sobre Telecomunicaciones Espaciales. Transformación en el sector satelital: disrupción e innovación en un contexto en el que, “más que nunca, el espacio es un sector estratégico y de gran importancia económica, donde nuevas oportunidades de negocio están surgiendo”, ha comentado Vaissiere.
Para la representante de ESA, la capacidad de utilizar y acceder al espacio es “un elemento indispensable para que Europa aborde cuestiones globales”, como el cambio climático, revoluciones tecnológicas o crisis humanitarias. Además, las telecomunicaciones espaciales favorecen “el crecimiento económico, la seguridad y la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas de Europa”.
Los programas de la Agencia se diseñan con el fin de conocer más a fondo la Tierra, el entorno espacial que la rodea, el Sistema Solar y el Universo, así como desarrollar tecnologías y servicios basados en satélites y fomentar la industria europea. Aunque las actividades obligadas de ESA (programas de ciencia espacial y el presupuesto general) se financian con las contribuciones económicas de todos los Estados Miembros, esta funciona según el principio denominado “de retorno geográfico”, es decir, invierte en cada Estado Miembro, a través de contratos laborales para programas espaciales, una cantidad más o menos equivalente a la contribución de cada país.
“Europa es la segunda potencia mundial a nivel espacial y es gracias a la inversión del sector público y la competitividad de la industria europea”, ha subrayado Vaissiere. Durante los quince últimos años, este esfuerzo en la carrera de la innovación ha desembocado en dos grandes proyectos: Copernicus, un sistema de observación de la Tierra, y Galileo, un sistema europeo de navegación por satélite. “Éxitos que nunca se hubieran logrado sin los compromisos de la UE, ESA y los Estados miembros. Sin embargo, Europa se ve desafiada por los nuevos jugadores del espacio que han lanzado proyectos muy innovadores”, ha señalado.
A grosso modo, los objetivos de la estrategia europea para conseguir un mayor rendimiento a nivel mundial son “maximizar la integración del espacio dentro de la sociedad y economía europea” o “facilitar sinergias entre actividades espaciales, civiles y militares”. En un contexto en el que “el mercado espacial está creciendo con una innovación sin precedentes en todos los segmentos”, es vital que “los socios compartan el mismo objetivo: el éxito comercial de esta aventura. Para lo cual, los socios tienen que compartir la financiación y los riesgos”, ha remarcado.
Entre las nuevas oportunidades que están emergiendo, la representante de ESA ha destacado la tecnología 5G, el nuevo estándar de las redes móviles. Un escenario en el que “el satélite puede desarrollar un papel sin precedentes en la transformación digital”.
Por su parte, Espinós ha emitido un mensaje positivo: “La demanda de los servicios satelitales existe”. Sin embargo, la carrera espacial y la implementación de nuevas tecnologías empujan al sector a ser “más flexible y más abierto” para afrontar “los cambios” que vengan. “Aquí habrá ganadores y perdedores, pero nosotros estamos haciendo los deberes”, ha señalado el consejero delegado de Hispasat.
Fotografías: UIMP 2018 | Juan Manuel Serrano