Santander.- En el ciclo de conferencias del Máster Interuniversitario en Historia contemporánea. Caminos de la Historia, que se desarrolla en el Paraninfo de Campus de Las Llamas, dentro del marco de los Cursos Avanzados de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), ha destacado la ponencia de Montserrat Huguet, profesora titular de Historia Contemporánea en la Universidad Carlos III de Madrid. Esta experta ha repasado los nombres y actos más sobresalientes de las mujeres que “han sido sujetos activos y partícipes en la adquisición de responsabilidades”, no solo en el bando armado y bélico, sino también como activistas pacifistas.
Durante su intervención, titulada Vanguardia y retaguardia, acción y protección: las mujeres y las guerras contemporáneas, Huguet ha destacado la idea de que las mujeres no juegan un rol de víctimas en los conflictos, sino que ha mostrado a las mujeres “como sujetos violentos y reprobables”.
Para Huguet, la mujer tiene diferentes cualidades y funciones dentro de las filas y, aún así, “siempre ha tenido que luchar contra el mito de la fragilidad”. Así, ha explicado que a lo largo del siglo XIX, la feminización de la actividad militar adquiría matices negativos en los ejércitos: “Aunque las mujeres desempeñasen todo tipo de tareas bélicas –creación de armamento, transporte de munición, cuidado de heridos, combate cuerpo a cuerpo- cuando aparecían en escena, alentaban al enemigo”. Además, la concepción social e instaurada sobre la labor de las mujeres en el conflicto era de “ayudante”, no de “partícipe”, ha matizado la ponente.
Estas ideas se dieron hasta la mitad del siglo XX, cuando comenzaron a surgir los movimientos de mujeres “patriotas, instigadoras, arrojadas, que apoyaban la lucha”, ha señalado la historiadora, quien ha descrito cómo en sus inicios el papel principal de estas mujeres era imponer a sus allegados masculinos que peleasen en la guerra. Más adelante, estas mujeres se disfrazaban de hombre para infiltrarse en las tropas y, para finales del siglo XX, “consiguieron profesionalizarse como mujeres soldado, llevando uniformes y cobrando un salario”, ha apuntado Huguet.
Por otro lado, la profesora ha hablado sobre los pacifismos vinculados a las guerras que tuvieron lugar en estos siglos. “Las mujeres feministas de esta época se aliaron con los conservadores pues compartían la idea de que las mujeres no debían dar su vida por la patria”, ha expuesto la historiadora, quien ha manifestado que la razón principal era que en la época las mujeres estaban concebidas para “dar vida y no quitarla”.
Los movimientos pacifistas por parte de mujeres se han asociado tradicionalmente a la idea de la maternidad. “Las mujeres que se oponían a los eventos violentos no compartían una ideología política clara, solo eran madres de la paz”, ha expuesto Huguet, quien ha recalcado la existencia actual de tales movimientos y colectivos por la paz, gestionados íntegramente por madres.
Fotografía: Juan Manuel Serrano | UIMP 2018
