Sevilla.– La arquitectura sostenible se nutre de muchas facetas del arte y así lo han hecho ver una docena de expertos citados en la tercera edición del curso "Acciones Comunes. Prácticas sostenibles y Estrategias operativas para la provincia de Sevilla" organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Sevilla, que fue clausurado ayer por el rector César Nombela Cano.
Durante cuatro jornadas, por la sede de la Fundación Biodiversidad han pasado ponentes de la talla de Carlos Quintans, León de Oro de la Bienal de Arquitectura de Venecia; José Morales, Premio Arquitectura Española; o los fotógrafos Bleda y Rosa, Premio Nacional de Fotografía, entre otros, quienes han compartido con arquitectos, escultores, escritores y fotógrafos sus influencias, metodología y fuentes de inspiración en proyectos comprometidos con la sostenibilidad, guiados por los profesores de la Universidad de Sevilla María González García y Juan José López de la Cruz, directores del curso.
Tras una primera jornada dedicada al reciclaje cultural que abrió la artista Mercedes Pimiento y los arquitectos Anna y Eugeni Bach y María González García se dio paso a la práctica del bricolaje, con las ponencias de los arquitectos José Morales y Marta Pelegrín, junto al artista José Miguel Pereñíguez.
Para hablar de la invención de lo cotidiano, en este curso se contó con la presencia del escritor Sergio del Molino y del arquitecto gallego Carlos Quintans, León de Oro de la Bienal de Arquitectura de Venecia por su Pabellón español, que realizó un viaje por las arquitecturas más elementales reflejadas en los actos cotidianos humanos cuando interactúan con la naturaleza. Quintans reveló las imágenes que influyen en su obra, desde lo más próximo, como el secado de unos congrios en salazón en Muxía, su tierra natal; hasta lo más lejano, por ejemplo, el secado del caqui o de la tierra al construirse el adobe en Filipinas, África o Sudamérica. Estas labores preindustriales, son para él soluciones creativas que ayudan a facilitar la circulación del aire en el hogar. "El arte de mirar, comer, descansar o hablar explica la arquitectura que uno hace", apuntaba Quintans. El arquitecto habló así de sus proyectos más íntimos, como son la Casa de Gandarío, la Casa en Barreiros, o la Casa Rodrigo, entre otros.
Y, por último, el cierre del curso de 'Acciones Comunes' bridó un broche de oro al arquitecto sevillano Francisco Reina, encargado del proyecto de la Cripta del Patio de Banderas, donde está ubicada la sede de la UIMP de Sevilla. Con motivo de su charla, los alumnos pudieron visitar la Cripta, donde descansan unas ruinas romanas, paleocristianas e islámicas y donde fue descubierto el más antiguo vestigio de la ocupación humana de lo que actualmente es la ciudad hispalense. El arquitecto habló de su trabajo con el tiempo, una inquietud que comparte con los fotógrafos Bleda y Rosa, Premio Nacional de Fotografía. Desde sus series experimentales "Campos de fútbol" o "Campos de Batalla", en las que el paso del tiempo es uno de los hilos conductores, se adentraron en la serie "Ciudades", dedicada a los lugares que visitaron los primeros colonizadores; y, de ahí, a "Estancias", en la que ponen el foco en lo construido, unidades mínimas habitacionales que, junto a "Tipologías", generó un gran debate entre las miradas de arquitectos, urbanistas, geógrafos, sociólogos, historiadores, artistas, políticos y estudiantes inscritos en el curso.