Santander, 21 de agosto de 2024-. El crítico literario y ex director de la RAE Darío Villanueva ha señalado este miércoles durante en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) que el término cancelación es “es el brazo ejecutor de la furia postmoderna”. Además, ha subrayado que esta censura se ve latente en varios ámbitos sociales y culturales, como los usos del lenguaje en palabras como momias o cadáveres, “la batalla con la corrección política” o la postverdad, a la que el también profesor de la Facultad de Filología de la Universidad de Santiago de Compostela ha tildado de “mentira postmoderna”.
Así se ha posicionado el gallego durante su ponencia en la inauguración del curso ‘¿Malas palabras? Cancelación, censura y creación’, donde ha apuntado que la cancelación tiene “su caldo de cultivo” en las universidades y que de estos lugares “se ha irradiado al conjunto de la sociedad”.
En ese sentido, ha lamentado que en las universidades de Estados Unidos se han creado unos ‘espacios seguros’ en los que, a su juicio, “en este momento está puesta en duda la libertad de cátedra y los profesores no pueden ejercer el derecho de la libertad absoluta para exponer sus ideas”.
“En Estados Unidos no se puede admitir que un profesor haga ninguna afirmación que produzca un desequilibrio emocional en sus alumnos, por lo que éstos se muerden la lengua”, ha denunciado Villanueva, quien ha criticado que esta situación se está trasladando a otras universidades de varios países.
“VIVIMOS EN UNA AUTOCENSURA TERRIBLE PORQUE TENEMOS MIEDO”
Por otro lado, el director del curso, Javier Huerta, ha denunciado que “vivimos en una autocensura terrible porque tenemos miedo a que se malinterpreten nuestras palabras”. “No son ni buenas ni malas, son lo que son y expresan ideas”, ha dicho.
“Yo no voy a estar de acuerdo con muchas cosas que digan los ponentes, y espero que ellos tampoco conmigo”, ha continuado el también catedrático de Literatura Española de la Complutense, quien ha asegurado que durante el curso “se va a razonar para llegar a un diálogo fértil en el que podamos todos entendernos y mejorar, porque para eso estamos en los estudios humanísticos y sociales”.
En ese sentido, Huerta ha destacado que la UIMP es un espacio en el que se pueden compartir ideas y opiniones “estemos o no de acuerdo” y que durante este encuentro se va a contar con una serie de artistas, creadores, teóricos de la literatura, el teatro y el cine “para tratar la problemática que tienen hoy en día los distintos creadores de los ámbitos sociales y culturales ante la sociedad”.
Según ha apuntado, estos días se van a ver ejemplos “ofensivos y duros” de ciertas obras artísticas en las que se “denigra a determinados grupos sociales”, con el fin de explicar que hay “modelos de censura que podrían funcionar incluso para mantener y alentar los derechos humanos”. “A lo mejor la censura no es necesariamente negativa”, ha añadido.
“El problema es que la libertad de expresión está aparejada a la libertad de pensamiento, y cuando no tienes ni libertad de pensamiento ni de expresión, lo que surge de manera inconfundible es el pensamiento único y este curso intenta luchar contra ello”, ha apostillado Huerta.
“LA CENSURA Y LA CANCELACIÓN SIEMPRE HA EXISTIDO EN EL TEATRO”
Finalmente, el dramaturgo y director de escena Ernesto Caballero ha afirmado que “la censura y la cancelación siempre ha existido en el teatro”, pero que “en estos momentos se está adoptando unas nuevas formas”.
“El teatro siempre ha tenido que bandearse entre limitaciones, como el discurso hegemónico y la exigencia del público”, ha opinado el también profesor, quien ha indicado que este género es “un espacio para la controversia y para acoger puntos de vista que no tienen que autoafirmar lo nuestro”.
Según ha apuntado Caballero, el teatro cumple “una doble función”, ya que por un lado cuenta con la “adhesión y la cohesión social” y por el otro con la corriente “socrática”. “Esa doble naturaleza, entre controversia e identificación colectiva, es el equilibrio en el que está precisamente el punto óptimo de la celebración del rito teatral”.
Asimismo, ha censurado que “muchas veces recurrimos a una caverna para no afrontar de una manera directa la verdad, porque siempre necesitamos poner una película eufemística a lo que sucede”, ha dicho el dramaturgo, quien ha criticado que “solamente queremos asistir a discursos que nos reafirmen”. “Yo voy a hablar de la necesidad de abrir ese espacio”, ha finalizado.