Santander, 11 de septiembre de 2019-. El curso Aseguramiento de la calidad y reforma de la ordenación de las enseñanzas universitarias en España, que se desarrolla en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander del 10 al 12 de septiembre, ha celebrado hoy una mesa redonda sobre ¿Cómo mejorar los procesos de aseguramiento de la calidad?
En el debate han participado el rector de la Universidad de Cantabria (UC), Ángel Pazos; la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda; el director de la Fundación para el Conocimiento madri+d, Federico Morán; y el director de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Galicia (ACSUG), José Eduardo López.
El rector de la Universidad de Cantabria ha explicado que la mejora del proceso de la evaluación precisa de tres requisitos: Un equilibrio entre la autonomía de las universidades y la evaluación externa, flexibilizar y simplificar los plazos y documentos, así como la coordinación entre las universidades, las agencias y las comunidades autónomas.
Además, Ángel Pazos ha señalado que, si se logran esos cambios, hay que afrontar una serie de retos como “la garantía de la calidad de la enseñanza a distancia, afrontar nuevas demandas y no olvidarse del espacio europeo”. “¿En todos los procesos de certificación se está pidiendo lo mismo?”, ha manifestado el rector quien apuesta por potenciar la titulación internacional, las prácticas y la calidad en la formación no oficial, entre otras cosas. A su juicio, existe un “problema importante” porque el sistema no está automatizado y desde las agencias “piden otros datos”.
Por su parte, la rectora de la Universidad de Granada ha señalado que los profesores jóvenes se están incorporando y lo tienen “complicado” y “no podemos resolverlo porque no tenemos una normativa clara”. “Vamos muy retrasados, el sistema de calidad no se ha puesto en marcha y es algo que urge”, ha valorado Pilar Aranda quien, por otro lado, también ha afirmado que “en diez años estar donde estamos es un éxito del sistema importante, pero supone nuevos retos”.
En cuanto a la postura de las agencias, el director de la Fundación para el Conocimiento madri+d ha puntualizado que la labor de las agencias es “técnica”. “Quien acredita y verifica es el Consejo de Universidades”, ha aclarado. En esta línea, ha declarado que el objetivo es “ayudar y convencer a las universidades que la acreditación institucional es una ventaja clara y es tendencia en Europa”.
Para Federico Morán el seguimiento es un elemento “clave”, especialmente “cuando hay títulos que pasan justitos o con promesas”. “Es vital para evitar irregularidades y que se corrijan”, ha considerado el director, quien ha trasladado las “ideas” que están desarrollando para “mejorar”, como es el caso de los indicadores, necesarios “para no estar visitando universidades y no molestar tanto”.
“No solo detectar, corregir cuando las cosas van mal”, es el punto de vista de Morán quien ha subrayado la necesidad de la implicación “para hacer llegar esta cultura de calidad”.
Asimismo, el director de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Galicia (ACSUG) ha destacado que “se requiere de la confianza mutua entre universidades y agencias”, “Un SGC debe servir para obtener información objetiva, detectar áreas de mejora, establecer objetivos, mejorar la calidad de las enseñanzas, optimizar recursos y rendir cuentas a la sociedad”, ha detallado José Eduardo López.
El curso Aseguramiento de la calidad y reforma de la ordenación de las enseñanzas universitarias en España, que se desarrolla en la UIMP del 10 al 12 de septiembre, discute durante estos días otros aspectos como Algunas propuestas concretas para un nuevo marco de aseguramiento de la calidad en las enseñanzas universitarias y Debate abierto sobre los modelos de aseguramiento de la calidad.
Foto: Esteban Cobo (UIMP)